por: Yorman Sarmiento
10/07/2023 | 8:00 pm
Nathional Geographic
Durante muchos años, un nenúfar Victoria gigante pasó desapercibido por los apasionados de las plantas sin saber que se convertiría, más adelante, en la especie de mayor tamaño confirmado en los últimos 100 años.
Por más de tres décadas, la planta formaba parte del herbario nacional de Bolivia, sin que nadie se diera cuenta del verdadero valor que poseía para la naturaleza.
En este sentido, Carlos Magdalena, experto en nenúfranes, siempre sospechó que podían existir especies de esta planta más grande las conocidas, “para mí estaba claro que esta planta no se ajustaba a la descripción de ninguna de las dos especies Victoria conocidas y, por tanto, tenía que ser una tercera».
Desde un tiempo, un estanque del Conservatorio Princesa de Gales de Kew alberga a las especies más grandes de nenúfares, así como los más pequeños del mundo, de hecho, se pueden encontrar algunos de un centímetro de diámetro, unas 300 veces más pequeños que los encontrados en Sudamérica.
Sin embargo, cuando se indagó sobre el pasado se la planta, se determinó que la Victoria boliviana era potencialmente grande y se hallaba en los jardines de la Rinconada en Santa Cruz de la Sierra (Bolivia).
Este nenúfar tenía unas medidas de 3,2 m (10 pies 6 pulgadas) que aumentaba a 3,37 m (11 pies) si se aplanaba el borde volcado, mientras tanto, la superficie aproximada era de 7,55 m2, muy similar a lo que puede representar dos camas matrimoniales.
Desde entonces se convirtió en la hoja de nenúfar más grande, además, poseía una hoja indivisa de gran tamaño y que jamás había sido documentada.
Una vez descubierto, los integrantes del parque La Rinconada decidieron recogerlo y fundirlo en yeso para, posteriormente, pintarlo con los colores naturales y así poder conservarlo para siempre. En la actualidad, cientos de personas acuden a estos espacios para contemplar la planta.