por: Jonás Rodríguez
11/03/2021 | 7:00 pm
Archivo
Seguramente al visitar una farmacia o al observar un elemento relacionado a ella has notado que la figura principal de su símbolo es una serpiente, y te has preguntado la razón.
Pues existen varias teorías al respecto, partiendo desde las presunciones religiosas, pasando por sus cualidades curativas, y llegando hasta las narrativas mitológicas.
Según algunos expertos, en numerosas culturas ancestrales, las serpientes formaban parte de los animales adorados, debido a su connotación divina.
Para estas civilizaciones, la serpiente era un símbolo de sabiduría; pero una sabiduría muy particular, vinculada con el flujo constante entre la vida y la muerte.
Esto, debido a que existía la creencia de que cuando estos animales se ocultaban bajo tierra viajaban al inframundo, razón por la cual eran capaces de «engañar a la muerte».
Por otra parte, en relación a sus cualidades regenerativas y de fertilidad, las civilizaciones creían que existía una relación entre el comportamiento cíclico de la luna y el proceso «recuperativo» de los reptiles.
En este sentido, el hombre arcaico pensaba que el proceso en el cual la serpiente muda de piel representaba que dichos animales conocían el secreto para mantenerse siempre jóvenes y saludables.
Además, ante este hecho, también de popularizó la hipótesis de que estas criaturas eran un símbolo de fecundidad, puesto que promovían la vida.
Por último, en cuanto a las historias mitológicas, su divinidad proviene de una narración que involucra al semidiós Asclepio, quien era una deidad griega relacionada con la medicina y que dominaba la técnica de revivir a los muertos.
De acuerdo a la historia, Atenea (diosa de la guerra) le entregó la cabeza de Medusa a Asclepio para que la usara en sus medicinas. La sangre que corría por los cabellos serpentinos del lado izquierdo de la cabeza producían un veneno mortal, pero la sangre del lado derecho era capaz de traer a los muertos de vuelta; desde entonces, el reptil empezó a ser asociado con la medicina.
Además, este mito también involucra otro elemento que hace parte del símbolo farmacéutico, la copa de Higía (hija del semidiós), la cual aparece unida a la serpiente en el ícono en cuestión.