por: Elena Velásquez
11/11/2024 | 7:30 pm
EFE
Aunque nació en África, el tambor es uno de los ritmos más tradicionales de Venezuela, por lo que se le considera parte fundamental de la cultura y la expresión artística criolla.
Si bien el tambor es parte de la autenticidad de algunas zonas del país como Barlovento, este ritmo musical no se baila de la misma forma en todas partes, aunque que sí hay una característica que es predominante, especialmente en la zona del litoral central: bailarlo manteniendo un pie atrás.
Sin embargo, la mayoría de las personas no suelen saber que, detrás del que es considerado como el «paso más popular» al momento de ejecutar esta danza; existe una gran carga histórica.
Es sabido que este género musical llegó al país de la mano de los esclavos negros, que fueron apresados por los españoles en las tribus africanas para usarlos como sirvientes y mano de obra en América, pero lo que no muchos saben es que uno de los estilos que ha trascendido para bailarlo nació en suelo venezolano.
Pese a que el tambor seguía siendo tocado al mismo ritmo que en África, las personas que estaban acostumbradas a bailarlo no eran hombres libres en Venezuela sino esclavos, y por ello, tenían que permanecer encadenados pesados con grilletes para evitar que se escapasen de sus «amos».
Por eso, para poder seguir ejecutando la danza, sorteando la incomodidad y el peso de las cadenas, debían arrastrar un pie y dejarlo siempre detrás, mientras movían el resto del cuerpo siguiendo el ritmo. De esta manera, nació el estilo más popular de la costa que, aunque hace cientos de años que se abolió la esclavitud, todavía hoy se mantiene entre los venezolanos que disfrutan de este baile.