por: María Fernanda Pérez
12/03/2024 | 5:30 pm
Pixabay
La malaria es una enfermedad parasitaria que afecta a millones de personas en todo el mundo. Esta enfermedad, transmitida por mosquitos, puede ser mortal si no se trata a tiempo. A pesar de los esfuerzos por combatirla, sigue siendo un problema de salud pública importante.
Sin embargo, un nuevo estudio realizado por investigadores de la Universidad Nacional Australiana (ANU) podría ofrecer una nueva esperanza en la lucha contra esta enfermedad.
De este modo, la investigación, encontró que un tipo de célula del sistema inmunitario, las células B atípicas (ABC), podría ser clave para combatir la enfermedad.
Las células B atípicas son un tipo de célula B que se encuentra en el bazo y la médula ósea. Se caracterizan por su capacidad para producir anticuerpos de alta afinidad, que son muy específicos para un patógeno en particular.
En el caso de la malaria, las células ABC pueden producir anticuerpos que se dirigen a una proteína específica en la superficie de las células infectadas con malaria.
Es así que, el estudio de la ANU encontró que las células ABC son esenciales para la respuesta inmune del cuerpo a la malaria.
En ratones, los investigadores encontraron que los animales que carecían de células ABC eran más susceptibles a la infección por malaria y tenían más probabilidades de morir a causa de la enfermedad.
“En este estudio, queríamos entender los mecanismos que impulsan la creación de ABC en el sistema inmunitario, pero también averiguar si estas células son buenas o malas para nosotros a la hora de combatir las infecciones”, detalló el autor principal Xin Gao, de la universidad australiana.
Este hallazgo sugiere que las células ABC podrían ser un objetivo potencial para el desarrollo de nuevas vacunas y tratamientos contra la malaria.
Además, los investigadores están trabajando ahora para desarrollar nuevas estrategias para estimular la producción de células ABC en el cuerpo, lo que podría ayudar a proteger a las personas de la infección por malaria.
Más allá de su potencial para combatir la malaria, las células ABC también podrían ser útiles para combatir otras enfermedades infecciosas como el VIH, la tuberculosis y la influenza.