por: María Fernanda Pérez
05/03/2025 | 10:08 am
© Michael Ferguson/Globe Photos/ZUMA Wire
La investigación sobre las muertes del actor Gene Hackman, de 95 años, y su esposa Betsy Arakawa, de 65, ha descartado la presencia de una fuga de gas significativa en su residencia de Santa Fe. La Compañía de Gas de Nuevo México concluyó su investigación sin encontrar evidencia de una fuga fatal, aunque se detectó una fuga «minúscula» en un quemador de la estufa, considerada insuficiente para causar la muerte.
La Oficina del Sheriff del Condado de Santa Fe, que lidera la investigación, confirmó que los resultados de la compañía de gas serán remitidos a la Oficina del Investigador Médico para su revisión. Además, se encontraron cuatro violaciones del código relacionadas con un calentador de agua y encendedores de leña a gas, pero ninguna de ellas implicaba fugas de gas o monóxido de carbono.
El sheriff Adán Mendoza había confirmado previamente que las pruebas de monóxido de carbono realizadas a los cuerpos resultaron negativas, eliminando esta causa como posible factor en las muertes.
Los cuerpos de Hackman y Arakawa fueron descubiertos por personal de mantenimiento en su residencia el miércoles pasado. Arakawa fue encontrada en el piso del baño, mientras que Hackman fue hallado en el cuarto de barro, cerca de la cocina. Un perro también fue encontrado muerto en la propiedad, aunque otros dos perros estaban ilesos.
Los investigadores creen que ambos individuos sufrieron caídas. Se encontró un frasco de pastillas y pastillas dispersas en la encimera del baño. El sheriff Mendoza reveló que el último registro del marcapasos de Hackman fue el 17 de febrero, nueve días antes del hallazgo de los cuerpos.
Durante la investigación en la residencia, los detectives recuperaron dos teléfonos celulares, medicamentos y una agenda mensual. La Oficina del Sheriff ha mantenido que no sospecha de un acto criminal, aunque la situación se considera «sospechosa» y justifica una investigación exhaustiva.
Las autopsias de Hackman y Arakawa aún están pendientes, y se espera que proporcionen más claridad sobre las causas de sus muertes.