por: Elena Velásquez
07/03/2022 | 1:00 pm
El Diario NY
Según las estimaciones de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), más de 1,73 millones de ucranianos se han visto obligados a abandonar su patria debido a la invasión rusa que inició el pasado 24 de febrero.
De acuerdo a las estadísticas, más de un millón de los refugiados fueron acogidos por Polonia, mientras que otros 180 mil fueron recibidos en Hungría; 128 mil en Eslovaquia; 79 mil en Rumanía; 82 mil en Moldavia y, por último, 53 mil se trasladaron a Rusia.
Tras 11 días del inicio de la guerra, el número de desplazados continúa elevándose, por lo que el alto comisionado de la ONU para los Refugiados, Filippo Grandi, advirtió que esta crisis migratoria se perfila como la más rápida desde la Segunda Guerra Mundial; puesto que, incluso las cifras de refugiados causadas por las guerras de Kosovo (1999) y Bosnia (1992), no arribaron ni al millón y medio.
Por otra parte, se espera que este lunes, 07 de marzo, después de dos intentos fallidos, Rusia abra corredores humanitarios para civiles desde las ciudades de Kharkiv, Kiev, Mariúpol y Sumy, hasta destinos seleccionados o puntos de alojamiento temporal en terreno ruso.
En este sentido, las fuerzas rusas anunciaron que la ruta de Kharkiv llegará directamente hasta Bélgorod; la de Kiev, pasará por Gostomel y Chernóbil, antes de entrara a territorio bielorruso, pasando por Gden y Gómel, antes de un último tramo en avión hasta Rusia. Para Mariúpol, se establecieron dos rutas: una hasta Rostov del Don (Rusia) y otra hasta Mangush (cuenca del Donetsk); caso similar al de Sumy, desde donde parirá una ruta a Bélgorod y otra a Poltava.
Al respecto de la asistencia humanitaria interna, el Comité Internacional de la Cruz Roja (Cicr) explicó que no pueden actuar como «garante» de un cese de hostilidades para evacuar a la población civil de la zona, puesto que un «acuerdo de principio» no es suficiente y como ente «intermediario humanitario neutral e imparcial», solo pueden «facilitar el diálogo entre las partes (del conflicto) para el tránsito seguro de los civiles».
En este sentido, el organismo indicó que ambas partes deberán convenir aspectos logísticos esenciales, tales como las ubicaciones de los civiles, las rutas de evacuación, los horarios específicos e incluso, la posibilidad de llevar asistencia humanitaria a las ciudades.